¡Herejes! ¡Blasfemadores!
Podía soportar, aunque renegando un poco, los amorcis, besus, y hermosuras. Pero ayer iba caminando contentísima por la calle hasta que vi un pasacalles (sí, muy moderno) y quedé estupefacta, congelada, pensando que mi cuerpo se había trasladado a un mundo paralelo.
¿Qué? ¿Perdón? ¿Vi bien? ¿Dice “pasitas bien arrugaditas” o enloquecí? Sí, vi bien, esa horrible expresión está escrita gigantísimamente en un pasacalles que puede ver cualquiera que pasea tranquilamente. ¡Sanción! Eso es agresión visual.
No existe imagen más horrible que dos pasitas bien arrugaditas, tratando de caminar de la mano, con bastones, gritando y meados. ¿A quién se le ocurrió que eso podia ser romántico?. Yo comprendo el mundo en que vivimos: estamos signados por valores como la belleza o la juventud eterna. También entiendo que algunos bien pensantes luchan contra estos valores sociales y se empeñan en demostrar que la imagen no es nada. Pero dejémonos de joder. De “lo que importa es lo de adentro” a “pasitas bien arrugaditas” hay un universo. Seamos honestos.
Que todavía haya gente que cree en el amor para toda la vida no significa que puedan andar ahí forzándome a imaginarme a dos pasitas bien arrugaditas caminando o correteando por un parque lleno de árboles (o, mucho peor, reclamando el asiento en el colectivo).
Necesito averiguar quién fue el inconciente que dejó terrible violencia expuesta en la calle. Quién obligó a mi cabeza a pensar cómo seré cuando llegue a pasita bien arrugadita. Quién dijo que horribles demostraciones de “amor” se podían expresar delante de todos. ¿Qué nos espera? ¿Qué nos depara el destino? ¿Un mundo de frutas podridas? ¿Malolientes? ¿De patas de pollo crudas y estacionadas bajo un enero infernal? ¿Hacia dónde estamos yendo?
Podía soportar, aunque renegando un poco, los amorcis, besus, y hermosuras. Pero ayer iba caminando contentísima por la calle hasta que vi un pasacalles (sí, muy moderno) y quedé estupefacta, congelada, pensando que mi cuerpo se había trasladado a un mundo paralelo.
“Vos y yo nos amamos tanto que vamos
a estar junto hasta pasitas bien arrugaditas”
a estar junto hasta pasitas bien arrugaditas”
¿Qué? ¿Perdón? ¿Vi bien? ¿Dice “pasitas bien arrugaditas” o enloquecí? Sí, vi bien, esa horrible expresión está escrita gigantísimamente en un pasacalles que puede ver cualquiera que pasea tranquilamente. ¡Sanción! Eso es agresión visual.
No existe imagen más horrible que dos pasitas bien arrugaditas, tratando de caminar de la mano, con bastones, gritando y meados. ¿A quién se le ocurrió que eso podia ser romántico?. Yo comprendo el mundo en que vivimos: estamos signados por valores como la belleza o la juventud eterna. También entiendo que algunos bien pensantes luchan contra estos valores sociales y se empeñan en demostrar que la imagen no es nada. Pero dejémonos de joder. De “lo que importa es lo de adentro” a “pasitas bien arrugaditas” hay un universo. Seamos honestos.
Que todavía haya gente que cree en el amor para toda la vida no significa que puedan andar ahí forzándome a imaginarme a dos pasitas bien arrugaditas caminando o correteando por un parque lleno de árboles (o, mucho peor, reclamando el asiento en el colectivo).
Necesito averiguar quién fue el inconciente que dejó terrible violencia expuesta en la calle. Quién obligó a mi cabeza a pensar cómo seré cuando llegue a pasita bien arrugadita. Quién dijo que horribles demostraciones de “amor” se podían expresar delante de todos. ¿Qué nos espera? ¿Qué nos depara el destino? ¿Un mundo de frutas podridas? ¿Malolientes? ¿De patas de pollo crudas y estacionadas bajo un enero infernal? ¿Hacia dónde estamos yendo?
1 comentario:
un poquito de pudor... sí por favor...
me confieso cariñosa, selectiva, empalagosa, pero selectiva... dicen que símpatica y abierta aunque más me gusta verme de chica dura y siempre me viví timida, pero con afán de superación!
con todo, un poquito de pudor, por favor...
"pasas arraugadas"?
peor... "pasitas arrugaditas"!
por si no era g´rafico suficientemente lo de "quiero envejecer a tu lado", siento que tuvieras que ver aquello...
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